Sabrina Bertelo es sinfin de sentidos. Su obra lo es. Con dos estilos claramente diferenciados (el pop y el abstracto) -y de alguna manera contrapuestos- es muy dificil intentar delimitar su reino. Pero si hiciéramos un pequeño y tímido intento podríamos definirlo en tres palabras: collage, collage, collage.


Collage desde lo formal en sus obras. Pinceladas gordas y tridimensionales que se mezclan con otros trazos, materiales, papeles, retazos, chatarras .Infinitas combinaciones, muchas veces imposibles, que tienden la cama para esas figuritas pop se posen. Figuritas que nos devuelven el paraíso perdido de la infancia. Pero nos lo devuelven manchado, intervenido. Vivido. Ya no es la imaginen nítido y pristina de nuestra juventud, impresas en páginas Technicolor.


Sus 'abstracciones' también se viven del collage. La emoción se plasma mediante trazos y colores que extrañamente se combinan como retazos y vuelven a generar sentido. Dos estilos, ciertamente contrapuestos pero profundamente comunicados.


Bertelo es una artista que camina a tientas pero con valentía- en un mundo que duele, y busca, a partir de pequeños retazos atesorados, aquel paraíso perdido que siempre está al llegar.